Relato 90
"Les ayudé como buena cómplice,
para evitar ese final... todo fue en vano.
De la manera más cruel, más vil,
más torpe, infame y miserable que se puede tener con quien te quiere,
con quien te anhela, con quien te sueña,
con quien te dice y te demuestra...
Se fue diciendo un tímido y casi Insonoro Adiós... de noche y a oscuras...
Rápido, con prisas, sin tiempo...
Una vez más...sin tiempo para ellos.
Quedándose ella fría y bloqueada.
Lo que nunca supo es que él,
la seguía buscando ...
en cada rostro
y cada cuerpo que acariciaba,
en cada beso, en cada cama,
en cada nuevo perfume que abrazaba,
en cada rizo, en cada pestaña...
Absorto en su búsqueda se le olvidó pensar que todos somos únicos...
Se arrepintió mil y una vez de su estúpida memez, de su falta de coraje...
el que a ella le sobraba y tanto le asustó...
Y si antes le alejó el Miedo,
ahora sería el Orgullo quien le impediría volver.
Y digo quien, porque ese Orgullo tenía volumen, presencia y autoridad.
No se volvieron a Ver."
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