Relato 252
¿Quién no ha sentido alguna vez el apego insano a su ruina?
Como quien se enamora de Roma y acepta en escombros la ciudad más bella, porque en sus calles y sus muros hay mucho más que piedra.
“Enamorado de mi ruina, viendo como se quema mi Roma”, (@polee_sm ),
viendo como se pierde y se ausenta; viendo su decadencia y cayendo en ella, con ella.
Con la esperanza mortífera de levantar lo desplomado, de financiar la bancarrota, de sanar al terminal, o de salvar al ahogado.
Enamorado de tu ruina, y que no haya quien te juzgue, que sólo tú sabes cómo de alto y como de grande fue tu imperio.
Enamorad@ de mi ruina, de mi Roma.
Mi ciudad eterna.
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