Relato 137
"Me contó entre lágrimas que aquella última mañana,
sin ser la más Fría del Invierno, la vivió como la más Gélida
y siendo la más soleada, la sintió como la más Sombría.
Me confesó que por muchas primaveras que pasaron nunca consiguió abrigar aquel destrozo. Sin ánimo de ser Víctima de Nadie, nada más que de su propia Ilusión....
Se desnudó aquella tarde, en plena calle, ante la indiscreción de extraños,
mientras unos reían y otros miraban atónitos, igual que yo...
Aquella Belleza de Mujer deshaciéndose en cada Palabra, en cada gesto de la Incomprensión...
Sin más escudo que el cristal de sus gafas y como único aliado su quiebre en la voz, Desató Nudos como Puños."
No hay comentarios:
Publicar un comentario